Ese también me parece otro de los grandes problemas del sistema educativo. Hacemos ver a los estudiantes que el único camino posible y con futuro al acabar la Educación Secundaria Obligatoria es continuar estudiando el Bachillerato.
La consecuencia directa de estos es que muchos continúan perdiendo el tiempo estudiando algo que no les gusta pudiendo optar por formarse en un curso de formación profesional, no tan exigente a nivel académico y mucho más pragmático a la hora de encontrar trabajo, que no todos valemos para ser ingenieros.
Al otro lado, quedan aquellos que alargan todavía más el camino del bachillerato y saturan (como comentáis algunos) de profesionales un mercado laboral que a día de hoy no puede absorver tanta cualificación proveniente de las universidades.
¿Solución? La utopía en la que se ha convertido hablar de un pacto entre los dos grandes partidos para no cambiar el sistema educativo con cada legislatura me genera tristeza y desánimo, pero lejos de cambiar a otro sistema político como el comunismo, me parece la mejor opción.
Un saludo