
Los estados financieros son la clave para sacarte la duda. Ya seas inversor, emprendedor o simplemente te pique el bichito de la curiosidad económica, entender estos informes te va a dar una ventaja enorme.
En esta nota te explico qué tipos existen, cómo se clasifican y dónde podés consultarlos en Argentina sin perder tiempo.
¿Qué son los estados financieros?
Los estados financieros son informes contables que muestran la situación económica y patrimonial de una empresa en un período determinado. Funcionan como una foto del estado real de las finanzas de cualquier organización, y permiten analizar si está generando ganancias, si debe más de lo que tiene o si está creciendo de manera sostenible.
Si sos alguien que invierte, presta plata, o simplemente hace negocios, estos documentos te cuentan toda la verdad.
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Clasificación de los estados financieros
En el contexto argentino, los estados financieros se dividen principalmente en dos tipos: los de propósito general y los de propósito especial.
Estados financieros de propósito general

Están pensados para que cualquier persona interesada (accionistas, inversores, bancos, ARCA, etc.) pueda entender la realidad económica de la empresa. Dentro de este grupo están:
- Estado de Situación Patrimonial: Muestra cuánto tiene y cuánto debe la empresa. Es lo que comúnmente se conoce como “balance general”.
- Estado de Resultados: Resume si la empresa ganó o perdió guita durante un período.
- Estado de Evolución del Patrimonio Neto: Refleja los cambios que hubo en el capital contable (aumento de capital, distribución de dividendos, etc.).
- Estado de Flujo de Efectivo: Detalla cómo entró y salió la plata, clasificándola por actividad operativa, inversión y financiamiento.
Estados financieros de propósito especial
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Se elaboran para cumplir con exigencias puntuales. No están dirigidos al público en general, sino a alguien en particular: un banco, una auditoría, un potencial comprador. Algunos ejemplos:
- Estados financieros intermedios: Se presentan por períodos menores a un año (como los trimestrales).
- Estados proyectados: Son estimaciones a futuro, muy usados cuando se busca financiamiento o se presenta un plan de negocios.
- Estados específicos de costos o de áreas: Para analizar sectores puntuales dentro de la empresa.
¿Y qué sigue después de saber cómo se clasifican? Bueno, toca ver cómo acceder a ellos.
¿Dónde podés consultar los estados financieros en Argentina?
En nuestro país tenés varias fuentes oficiales y confiables para ver los estados financieros de una empresa:
- Comisión Nacional de Valores (CNV): Toda empresa que cotiza en la Bolsa porteña tiene que publicar sus balances en el sitio de la CNV.
- Boletín Oficial: Muchas sociedades anónimas publican sus estados financieros ahí, sobre todo si no cotizan.
- IGJ (Inspección General de Justicia): Si querés investigar una sociedad radicada en CABA, podés pedir informes en la IGJ.
- Webs corporativas: Las empresas grandes suelen tener una sección de “relación con inversores” o “transparencia” donde suben sus balances.
- Plataformas privadas de datos financieros: También hay portales pagos (y algunos gratuitos) que reúnen información de muchas empresas para facilitar el análisis financiero.
¿Para qué sirven los estados financieros?
Sirven para mucho más que cumplir con el contador. Estos documentos son la base para tomar decisiones como:
- Invertir o no en una empresa.
- Otorgar crédito o exigir garantías.
- Evaluar la gestión de los directivos.
- Planificar estratégicamente el futuro de un negocio.
En definitiva, los estados financieros son una herramienta indispensable para cualquier persona que quiera entender cómo se mueve la plata en una empresa, evitar sorpresas y tomar decisiones con los pies en la tierra.